9/9/09

La vida me está bombardeando señales y no sé muy bien como interpretarlas. Las indicaciones parecen clarísimas y la ramificación de caminos se bifurca con asombrosa coherencia fantástica. A veces tengo la certeza de que todo el universo danza acompasado en un ritmo que poco conozco, pero muy bien percibo. Le encuentro mensajes ocultos a muchas situaciones y me dejo llevar por la vida vertiginosa… que me trajo aquí.
Ahora mismo estoy perdida. No sé a donde ir y solo me resta ver a la gente pasar. Sentarse en un café a escribir es casi poético. Más aún si una vela parpadea iluminando frágilmente la mano que dibuja y una ventana abierta despeina persistente las hojas en las que escribo. Pedí un café con leche y una medialuna. Sentí necesaria una excusa para aquí sentarme. Una vez asumida mi situación, surge sencillamente el deseo de contemplar y ser. De relajarme y vivir.

2 comentarios:

  1. En este blog encontre dos cosas de las que me sorprendi: primero, que igual que en mio, el nombre tenga algo que ver con miel. Segundo, es extraño leer un texto asi que me suena mucho a algo que yo escribiria, la forma de sentir la vida.
    Yo me alegro con el simple hecho de sentarme en una vereda escuchando todos los sonidos que se me presentan, y mirando al cielo, el que me brinda un placer inexplicabe. Me equivoco si digo que vos tambien lo sentis asi?

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  2. es que cuando un descubre el placer, la felicidad genuina en las cosas cotidianas, siente la necesidad de relajarse y vivir; de contemplar, sin cansancio, todo lo que nos rodea y el misterio interminable que esconden.

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